Juanfran Melgar no tuvo una educación convencional tal como la de sus coetáneos limeños. Siempre ha tenido una visión de él en ir más allá, romper el molde. Al terminar la secundaria viajó a Alemania a estudiar fotografía especializada en arquitectura, en la universidad de Munich. Durante su estancia allí él se enamoró de la ciudad: “Me encantaba caminar por la ciudad y apreciar mucho los edificios”. Cuando regresó a Lima, empezó a trabajar con el diario El Comercio, en donde aprendió mucho sobre historia del mueble y arquitectura (trabajo de grandes personajes como Freddy Cooper, Richard Malakowski, Oscar Borasino, Victor Aburto, entre otros) Además, trabajó haciendo retratos y fotos de moda para Luces y Somos. Sin embargo, se dio cuenta que quería explorar nuevos horizontes. Fue así como se aventuró en el arte.
En el año 2007 inició un proyecto llamado Artística, a través del cual el artista intervino espacios arquitectónicos, con fotos de gran formato de pared a pared. “En esa época nadie lo hacía, ni aquí, ni en otro lado”. El fin era descontextualizar objetos cotidianos, y tuvo muy buena acogida. “No era arte tipo galería, no era diseño, era un rubro inventado. Tal vez estoy hecho para salirme de la raya”. Nos cuenta en un estado divertido.
Su primera exposición individual fue en el 2010. La realizó con la ayuda de su amiga Kareen Spano, quien fue fotografíada realizando un performance en su hacienda en Huachipa, a la que le decían “La Crika”. Este lugar, un día tuvo un paisaje perfecto, pero debido a las prácticas de las industrias locales empeoraron el paisaje hasta dejarlo irreconocible. Esta exposición consistió en: Una serie de fotografías muy conmovedoras con Kareen, en lo que quedaba de la laguna que alguna vez estaba dentro de la hacienda. “Fue muy emotivo y muy significativo, porque somos amigos de la infancia y hemos pasado toda nuestra infancia en su hacienda, y ahora es un terral con un cráter al medio, fue muy importante para mi”.
Luego de varias exposiciones colectivas, su segunda exposición individual »Las cosas como son» fue en el 2012 en la galería “Índigo y Atípico” de San Isidro, y trataba sobre la dualidad de las situaciones en la vida. Las piezas de la muestra consisten en una serie de cubos en acrílico que tenían dos lados impresos por dentro. Figuras geométricas que podían parecer perfectas dependiendo de donde se les mirara. “La felicidad es una decisión, no es algo fortuito. Hay gente que dice que la felicidad es efímera o viene por momentos, esos son los momentos en los que te sueltas tanto que te permites ser feliz. Pero ¿Qué pasaría si prolongamos esos momentos? Al final solo existen momentos, en los que te sientas así”.
Ahora último ha presentado su quinta exposición individual titulada »CÉLULA»en la galería “Indigo”, en la cual presentó 24 composiciones fotográficas basadas en arquitectura con fotos tomadas en diversos ciudades como: New York, Los Ángeles, Sao Paulo, Madrid, Barcelona, Buenos Aires, entre otros. Se basó en la arquitectura, la cual toca mucho el corazón de Juanfran. La inspiración también viene de los muchos viajes que ha realizado a lo largo de los años, sobre todo las edificaciones que ha llegado a captar con su lente y con su corazón. “He tratado de crear unos patrones, como unos túneles que te llevan a un sitio, que puede significar algo diferente para ti como para mi, pero que es como una transición a un cambio positivo. Y todo esto lo estoy relacionando con la arquitectura”.