Tracy Freundt, antes modelo y ahora creadora de contenido, fue tímida durante su infancia. La creadora de «El diario de mami» cuenta que su madre la inscribió en clases de actuación y modelaje. En principio, la finalidad de que llevara talleres no tenía como objetivo que se formara como modelo, sino que adquiera herramientas de desenvolvimiento para su vida. A pesar de ello, entre taller y taller, le agradó el crecimiento alcanzado y fue así que comenzó a hacer comerciales.

A sus 18 años trabajó en Habacilar, programa icónico de la televisión peruana de la década pasada. En el espacio emitido cada tarde, ella era “Traycisita”, sobrenombre que le puso Raúl Romero, conductor del programa. Ello en referencia a su dulzura y sonrisa constante. “Traycisita era la amiga de todos los personajes de Disney, la que conversaba con Peter Pan y se encontraba con Blanca Nieves en el parque. Ella sigue en mí. Es más, vive conmigo día a día. Yo tengo mucho de eso. Creo que parte de esa imaginación me hace amar trabajar cerca a los niños”.

La mecánica del programa potenció sus capacidades escénicas. En Habacilar habían varias modelos que, lejos de ser personajes que figuraban exclusivamente para entregar premios, se las veía co-animar el show, hacer entrevistas y notas periodísticas. “Ha sido mi mejor escuela para todo: para luego hacer mis shows infantiles, para desenvolverme en mi vida profesional y ahora en mis plataformas en redes sociales”, cuenta.

Después de Habacilar, su carrera televisiva continuó en programas como Canta si puedes y Esto es Guerra, sin embargo, en 2015 al nacer su hijo Juan Ernesto decidió centrarse en su crianza. Como madre, hubo un episodio que la estremeció: los primeros cinco días de vida su primogénito los pasó en Unidad de Cuidados Intensivos. Tuvo una complicación, así que Tracy espero su mejora para poder volver a casa junto a su pequeño. Una vez dado de alta, puesto en sus brazos, Juan Ernesto se arropó en ella y buscó su seno para alimentarse. “Me dejó sin palabras la misma naturaleza con la cual reconoció mi pecho para buscar su propio alimento, su carita chiquitita… Ahí me di cuenta de que era una bendición poder ser madre, poder dar vida”.

Después de lo sucedido, Tracy se centró únicamente en la crianza de Juan Ernesto durante su primer año, y con el pasar de los meses logró adaptar su emprendimiento en el mercado de eventos infantiles a su nievo estilo de vida. Tracy decidió hacer todo ese esfuerzo porque tiene la convicción de que los hijos crecen muy rápido y el tiempo en que dependen de los padres, al menos en los primeros años de crecimiento, es corto y transcurre fugazmente. Ella lo aprovechó. “La verdad es que no me arrepiento. Soy muy feliz de mirar para atrás y ver tantísimas cosas que hemos hecho juntos cuando era pequeño, y haber podido tener el tiempo y la disposición para estar entregada a él y a mi maternidad”.

La creación de «El diario de mami” surge y está basada en su experiencia como madre primeriza. «Justo en ese momento mis dos mejores amigas eran solteras, sin hijos, entonces ya las tenía saturadas de todo el día hablar de mi gordo; y, no sé, hice esa plataforma como jugando, y de pronto reconocí un espacio donde había tantas mamás que sentían lo mismo, que tenían las mismas dudas, los mismos miedos”, señala.

En mayo del 2016 publicó su primer vídeo en YouTube. Tracy se sorprendió gratamente por la comunicación que generó el vlog entre ella y sus seguidoras de la época de Habacilar, las populares «académicas», como se le conocía al público juvenil que visitaba el set del programa. Freundt exhorta a sus subscriptoras a sentirse bien consigo mismas y no preocuparse demasiado por el cambio físico durante el embarazo. Para ella, la prioridad debe ser mantener un estado mental óptimo para que la belleza se repotencialice. Recomienda que cada una, en la medida de lo posible, busque su propio espacio donde pueda dispersar su mente de la agitada rutina gestante.

La vida como creadora de contenido para una mamá está llena de frenesí, entre grabar y editar videos. «Hay días que son difíciles. Cuando me siento muy agobiada al final del día o por el mismo estrés, simplemente no subo contenido. Me relajo, trato de pensar en otra cosa, o, de subir contenido, trato de ser siempre muy honesta y genuina en lo que comparto».

Con miras hacia el futuro, Tracy quiere seguir informando a su público sobre la educación para infantes en el país. “Este tiempo de aislamiento nos ha hecho ver cuán importante es la educación, y cuán convencional estaba, basándonos en una educación que es muy lineal cuando cada niño es un mundo diferente”.