Nuestro redactor de Arte, Alejandro Céspedes-García, realizó una entrevista a una de las galeristas más notables del momento, Brenda Ortiz Clarke (@bloc_art_peru), cuyo portafolio de artistas se presentará en la feria de arte Art Lima 2019, la cual inaugura hoy, 03 de abril.
El mercado del arte cuenta con diferentes tipos de actores que intervienen -desde el lugar que les corresponde- en la creación y promoción de las piezas y obras que, poco a poco, se van haciendo realidad. En este universo artístico -lleno de cultura, personalidades diversas y belleza estética a flor de piel- se encuentran los galeristas, los art dealers y los gestores culturales.
Una de ella es Brenda Ortiz Clarke. Nacida en Escocia y criada en Lima, Brenda –hoy, fundadora de BLOC Art Perú- está dando la pauta en el mundo del arte en nuestro país. Ex alumna del Liceo Naval e hija de un marino historiador y una madre quien –según ella- ha sido su máxima inspiración en el desarrollo de su sensibilidad artística, nos abrió las puertas de dos de sus principales pent-houses para exhibir y conversar con nosotros acerca de su vida como galerista limeña.
Tus raíces son peculiares. Eres escocesa de nacimiento, pero has vivido siempre en Lima. ¿Cómo así viniste al Perú?
La verdad de las cosas es que nací en Escocia por pura casualidad. Mi padre pertenecía a la Marina de Guerra del Perú y además era historiador. Estaba estudiando en la Universidad de Saint Andrews -y viviendo con mi madre- cuando vine a este mundo. Al año me vine a Lima; sin embargo, sí mantengo un lazo con la comunidad escocesa y, sobre todo, me encanta un buen scotch. (risas)
¿De quién heredaste el gusto por lo artístico?
De mi madre, definitivamente. Todo el enfoque artístico y creativo viene de ella. Desde muy chica, a mí y a mi hermana, nos ha criado alrededor de toda esta magia. Música clásica, en los viajes a los museos… Era una constante de “respira, inhala y exhala arte”. Me enseñó a mirar el lado más profundo de las cosas, a preguntarme el porqué de todo, a percibir la estética de lo cotidiano.
Remarcas mucho el tema de la, prácticamente, crianza desde el arte que has tenido, ¿te ha definido como lo que eres actualmente?
Remarco mucho el tema de la educación como tal en este proceso. Creo que todo viene de casa. Y no solo me refiero a cuántos libros te comiste, sino a valores, intereses y gustos. Es intangible. Se vuelve un ADN construido por la educación. Y sí, totalmente es de las principales causas de lo que soy ahora.
¿Cómo y cuándo empezaste a desarrollarte en el Arte por propia iniciativa?
Desde cachimba en la universidad. Estudié en la Universidad de Lima y uno de los más grande referentes -en cuanto al arte- fue un profesor buenísimo llamado Oscar Luna Victoria. Nos teníamos mucho cariño y una estima muy grande. Siempre estaba atentísima a sus clases porque te exigía muchísimo. Me enseñó Historia del Arte y recuerdo que mi exposición en su curso fue sobre Tola, cuyas obras se venden ahora en BLOC Art. Asimismo, Julio Hevia, fue otro de los profesores que me hacían salir del cascarón. El reto por crear era constante, y eso me encantaba.
¿Cómo se inicia BLOC Art?
BLOC Art comienza como una iniciativa que busca promover talento local. Tenemos un portafolio de más de 25 artistas peruanos locales y, desde hace poco tiempo, se están introduciendo algunos artistas latinoamericanos. No lo llamaría una galería, es más que todo un portafolio. Es una amalgama que nace como una proyección de quien soy. Son mis iniciales.
¿En qué sentido es una proyección de ti misma?
De alguna forma me identifico con cada artista que forma parte de BLOC Art. La selección de artistas parte desde el hecho de que alguna manera me mueven. Nunca es por compromiso. Aisha Ascóniga, Entes, el maestro Víctor Delfín… Si no hay una buena relación, no voy a poder venderlo bien. Es una conexión de adentro hacia afuera. Todos tienen demonios internos, incluyéndome que desencadenan una exploración fantástica de cada obra y artista.
¿Qué demonios internos tiene Brenda Ortiz?
(risas) Definitivamente, no saber qué quiero y la ambición. Creo que esta última, si no la manejas bien, puede llevarte a la insatisfacción constante. Ah, y la vanidad.
¿Eres amiga de todos los artistas que representas?
No necesariamente. Al menos, no de todos. Creo que no hay que confundir. La amistad se genera dentro del tiempo y, el espectro profesional es lo que marca cuán bueno puedes llegar a ser.
¿Te consideras feliz?
Sí, totalmente. Creo que es una constante. Tienes que pasar por el fracaso para ser exitoso. ¿Soy feliz? sí soy feliz. ¿soy plena?, sí soy plena. No busco felicidad. Para mí, la felicidad es.
¿Qué hace distinto a BLOC Art de otras galerías de Arte?
Son unas vías de conexión, son vías alternativas. Nosotros no hacemos exhibiciones abiertas al público en general, porque no tenemos una galería en sí. Tenemos penthouses donde conectamos con el público mediante ventas privadas (Private Sales), cenas privadas (Art & Dines). Lo mejor para nosotros es trabajar el contacto. Quiero evitar ser una pared entre el arte, el artista y el consumidor del arte.
¿Cómo valoras a un buen consumidor de arte?
Llamo consumidor de arte no solo a quien lo compre y adquiera, sino a quien tenga una sensibilidad por él y lo aprecie. Soy muy consciente que el arte es alimento para el alma. Lo es para mí.
¿Arte clásico o contemporáneo?
(suspira) Arte para el alma. Lo que me mueva. Creo que no se debería menospreciar a ninguno.
Háblanos de las mujeres en el mundo del arte, ¿has tenido alguna traba en el camino en el mundo del arte?
No que yo sepa. Bueno, voy a cumplir 32 años, aunque parezca de menos (risas). Creo que mucha gente se sorprende de cuán emprendedora puedes ser cuando eres muy joven. La verdad que no me hago tantas bolas. A pesar de ser un mundo (el del galerista) tan masculino y de personas mayores, yo lo que hago es aprender, siempre.
He podido asistir a varios de los eventos de BLOC Art y me queda siempre la sensación de que tienes un ojo muy crítico del mundo al escoger a las obras y los artistas. Las obras que se exponen son –en gran medida- muy sugestivas de muchas estructuras hoy imperantes. ¿Tienes algo contra lo establecido?
(Risas) Creo que se tiene que ver siempre “qué más hay”. Hay que pensar desde adentro hacia afuera. Cada artista critica en su forma y desde su esencia. El portafolio no es antisistema pero sí funciona como un alternativo. BLOC Art busca romper esquemas, y en ese sentido, el arte es el mejor vehículo para lograrlo. Hay que engranar y conectar. La experiencia del arte ayuda siempre a conectar. Y si te mueve, nada ni nadie debería juzgarte.
¿Qué proyectos vienen para BLOC Art?
Viene –en primer lugar- nuestra participación en la feria Art Lima con tres solo shows con Martin y Santiago López de Romaña y Entes. Asimismo, una colectiva con 6 artistas en donde estarán Aisha Ascóniga, Luis Miguel Díaz Piccone, Claudia Caffarena, Daniel Torres, Rember Yahuarcani y Sandra Cannock; esta última con una propuesta inspirada en el concepto del azúcar -que me encanta porque adoro el azúcar y el dulce- (risas).
¿Qué postre sería Brenda Ortiz Clarke?
(risas) Definitivamente, soy un suspiro a la limeña. Mega dulce.
¿Hay planes de salir del mercado peruano?
Bueno, totalmente. Nos presentaremos ahora en Buenos Aires, en la feria de arte contemporáneo MAPA BUE- que sucede en paralelo a ArteBA-, con una colectiva en donde estarán los hermanos López de Romaña, Patricia Jenkins, Luis Miguel Díaz Piccone, y el artista argentino Boom Boom Kid. Uno de mis deseos más grandes es seguir incluyendo a más artistas de la región a nuestro portafolio. Ya lo decreté.
¿Hay algo más que decretes?
(risas) ¡Pero por supuesto! Abu Dhabi 2021…