Marcelo Wong es un artista plástico peruano con una afinidad por las esculturas y los volúmenes. Su curiosidad le ha permitido tener un estilo original probando distintos enfoques y técnicas desde la universidad. En sus primeros años como artista, nació una de sus primeras creaciones “el gordito”, el cual fue retomado 6 años después dado que sus profesores le ayudaron a explorar distintas técnicas que ahora se ven reflejadas en la variedad de sus piezas. Esta enseñanza Marcelo trata de comunicar a través de sus talleres creando espacios libres para poder jugar, sin presiones y reforzando la experimentación. “No hay una manera de hacer las cosas, tenemos que ir probando”.
Hace 5 años nació su primer hijo llamado Ignacio y esto significó una transformación en su proceso artístico- “Al principio mis anhelos se centraban en logros, luego me di cuenta que este es un camino totalmente personal, ahora tengo claro hacia dónde quiero ir: disfrutar la vida, experimentar, compartir y poder hacer cosas que acompañen lo que vivimos”. Así como Marcelo relaciona el arte y la crianza enseñándole a Ignacio que ser artista conlleva responsabilidades y compromiso; Ignacio le enseña lo que es “mantenerse en estado de niño” jugando, desconectándose de lo rápido que pasa la vida y disfrutando de las cosas simples.
Actualmente quiere involucrarse más en procesos industriales y está utilizando nuevos implementos digitales para nuevas creaciones las cuales podemos observar en los últimos proyectos de Marcelo donde trabaja con distintas marcas que están en sincronía con su arte.
Este artista no deja consejos “Si quieres ser artista, infórmate, ten paciencia, sé perseverante y constante”. Marcelo tiene clara su meta “Mi gran proyecto es mi familia, en abril la completamos con la nacimiento de nuestra hija, lo más importantes es estar juntos y bien”.