A veces nos concentramos tanto en las grandes películas de taquilla que dejamos pasar las historias más emotivas y renovadoras. A continuación 3 cortos que merece tanto crédito como un gran filme.
Piper (2017)
Es un cortometraje producido por Pixar y creado por Alan Barillaro y Marc Soundeimer. El corto dura 6 minutos y la historia trata acerca de Piper, una pequeña ave de la costa, que deja el nido por primera vez para irse a buscar comida. Pero Piper se encontrará con obstáculos en el camino que harán que sea difícil alcanzar su objetivo.
No fue una gran sorpresa que Piper se ganara el Oscar en el 2017 ya que consta con un realismo increíble que se puede apreciar en cada toma del inigualable trabajo en 3D. Y el corto nos deja con la reflexión de cómo debemos crecer en un mundo que nos parece tan grande e intimidante mediante el valor de superar los miedos.
Feast (2015)
La imaginación de Disney va más allá y ahora nos presenta esta historia de amor puro. La de un niño con su mejor amigo, un perro llamado Winston. El director Patrick Osborne, nos guía a través de la historia, de manera divertida e inocente como se puede cambiar la vida de alguien con una relación amorosa.
Los 7 minutos de historia son producidos por el estudio cinematográfico de Walt Disney.
The Lost Thing (2011)
Es un cortometraje de 15 minutos que nos transporta a un mundo, solitario y mecánico, donde ya nada parece encajar en la rutina, y nada parece importar. Personajes que te emocionará, tales como animales en extinción y/o objetos inutilizables nos enseñan la realidad. Dirigido por el ojo creativo de Andrew Ruhemann y Shaun Tan.