Apasionada, detallista y humilde. Son las tres palabras que definen a la cantante y compositora peruana, Nicole Favre que desde la Terraza del Hotel BTH nos teletransportó a su universo. 

Desde muy pequeña supo que la música era lo suyo. Su papá le cantaba canciones para dormir de Elvis Presley. Una navidad, a la edad de siete años, le regalaron un piano. Nicole aprovechó ese instrumento al máximo, componía melodías e iba sensibilizando más su oído como clave básica para crear nuevos ritmos. “Toda mi niñez, era yo sola contra el mundo. No me gustaba decir que cantaba. Era yo encerrada en mi cuarto o en mi baño, sacando las canciones por oído. Todo el mundo sabía que me gustaba la música, pero nadie realmente sabía que cantaba…”

Tímida al principio, Nicole poco a poco fue dejando los nervios atrás y se animaba a mostrar su talento al mundo entero. La primera vez que cantó en público fue El Salmo en su Confirmación, cerrando los ojos y teniendo a Dios como testigo. A lo mejor, esa fue la señal de buen augurio que traza la carrera de Nicole. “La fe no se trata solo en creer en Dios, sino también en creer en uno mismo. Tener fe en que puedes lograr lo que te propongas, que puedes salir adelante y hacer lo que te gusta”

Así como su papá la acercó a la música, Nicole está agradecida también con su mamá, quien le ha enseñado a no ser conformista y a no aceptar un NO por respuesta. “Gracias a ella es que no me rindo nunca… y no pretendo hacerlo”

Su primer single estrenó hace 5 días y ya cuenta con más de 30 mil reproducciones. Orgullosa, Nicole nos cuenta que es la primera vez que ella escribe algo, compone y produce. Me gustas es una canción con un ritmo difícil de resistir, y que de seguro más de uno termina amando y bailando.

El sentimiento que la llena, inspira y apoya es el amor. Nicole está feliz con todas las letras, pues tiene a su lado a alguien que la escucha, comprende y que durante toda la entrevista, la estuvo mirando con unos ojos de enamorado y sobre todo, sinceros. Nos cuenta que una vez en una presentación en Estados Unidos, cometió una locura de amor. ¡Animó a su enamorado a subir al escenario con ella y bailar juntos! Una experiencia inolvidable.

A pesar de que no puede revelar mucho sobre sus próximos proyectos, Nicole está segura de que si lo hace de corazón, todo el universo conspirará para hacer sus sueños realidad. A paso firme, Nicole se encamina a puertas que se abren y está lista para brillar.