Ingrid Altamirano siempre ha estado ligada al arte. Cuando estaba en el colegio, era la primera en bailar o actuar frente a todo el mundo. Su padre al ver todo su potencial la inscribió en el Dance Studio de Fiorella Cayo para poder explotar todo su talento. Pero su carrera en realidad dio inicio cuando a los 12 años su madre la llevó a las audiciones para el concurso Código Fama de María Pía y Timoteo.
Esta primera aparición en televisión fue su primera gran oportunidad y la que le abrió muchas puertas. Ingrid llamó la atención de uno de los productores del programa, quien la invitó a audicionar para el programa La Akdemia, popular por esa época. Necesitaban adolescentes que cantaran y bailaran para que se sumen al elenco y fue entonces cuando su carrera empezó a despegar. En lo que duró la producción, compartió pantalla con Flavia Laos, Andrea Luna, Alejandro Roca Rey y otros actores y actrices.
Otra de las producciones en las que Ingrid ha participado ha sido la popular teleserie “Al Fondo Hay Sitio”, cuya experiencia, nos confiesa, ha sido una de las más grandes que ha tenido. “Fue uno de los elencos más divertidos en los que haya actuado. Veía a todos los personajes conocidos que entraban y salían de las dos unidades de grabación. Era una locura, pero definitivamente una de las más bonitas que me tocó vivir al iniciar mi carrera”.
Aunque tiene múltiples talentos, piensa que ponerlos en práctica es un hobbie. No se considera una modelo profesional, pero cualquiera que viera sus fotos en Instagram pensaría lo contrario. Crear espacios y poder mantener un feed bonito y llamativo, además de compartir información de valor en sus redes sociales es algo que le encanta. La actuación la tiene tan presente en su día a día que siempre le dicen que nunca deja de actuar, y cree que ya es algo que forma parte de ella y siempre será así.
Para Ingrid, viajar es una oportunidad más para mejorar su actuación. “Me encanta conocer nuevos lugares, nuevas costumbres, descubrir y apreciar nuevos paisajes. Ahora me he propuesto conocer más de mi Perú. Espero poder lograrlo”.
Una de las nuevas etapas de su carrera es ser conductora del programa YOY, que se transmite por el canal J. “He conocido tantas cosas, lugares y personas que me han llenado el corazón y me han hecho feliz. El equipo de YOY ha sido uno de los bonitos que he tenido hasta ahora y son personas a las quiero y admiro mucho”. Una nueva temporada del programa se venía con fuerza para este 2020, pero debido a la coyuntura la producción tuvo quedar en stand by. “Todo se ha detenido. Muchas cosas han cambiado para todos, para el equipo, para el canal, pero estoy segura que algo nuevo resurgirá”.
Como buena emprendedora Ingrid, ha logrado reflejar sus múltiples talentos en la creación de Fun4Kids Perú, una empresa que se encarga de organizar fiestas infantiles y crear momentos mágicos al lado de artistas, con el objetivo de inculcar sensibilidad, empatía, pasión y respeto a niños y niñas. Como todos los negocios en la actualidad, se han tenido que adaptar al Estado de Emergencia Sanitaria, y es así como vienen ofreciendo sus servicios a través del virtual, donde no solo ofrecen shows infantiles online, sino también talleres para los pequeños en casa.
El lado espiritual de Ingrid, sembrado por su madre, tiene un mantra: Hacer todo aquello que nos haga sentir bien sin perjudicar a los demás. Al igual que todas las personas, ella también tiene momentos de debilidad, pero ha aprendido a sobreponerse y no perder la brújula. Por ello medita, hace yoga y trata de estar en constante contacto con la naturaleza. Considera que uno debe ser consecuente con lo que publica en redes y sus acciones en el mundo real. “Hoy en día los influencers, artistas y marcas tenemos una gran responsabilidad con la información que brindamos y hacemos llegar a nuestros seguidores. No se trata solo de mostrar un estilo de vida que, lastimosamente, a veces ni existe, sino es abrir las puertas a un espacio donde te puedan conocer como realmente eres y puedas compartir información de valor con ellos”.
Por el momento se encuentra trabajando en su técnica vocal, pues cree que todavía no ha tenido la oportunidad de compartir su canto con el mundo. Tal vez pronto se anime a hacerlo. Esperamos grandes cosas de Ingrid.
